AQUÍ NO HAY PLAYA VOL. II

Después de reunirnos todos a una hora tardía para el desayuno y temprana para el almuerzo, iniciamos una ruta turística por la ciudad que provocó alguna que otra ampolla en los delicados y bonitos pies de alguna de nuestras musas.

Nos tomamos un algo en una cafetería muy chula ( de la cual no recuerdo el nombre para variar ) y a la salida nos topamos de morros con Candela Peña, que lucía un look muy fashion que no concordaba para nada los papeles a los que nos suele tener acostumbrados. Al verme se abalanzó sobre mí y charlamos largo rato, haciéndome prometer que volvería a no mucho tardar para poder quedar con ella y hablar de sus nuevos proyectos, a lo cual accedí gustoso ante el asombro de los que me acompañaban. Llegados a ese punto, mi víctima estaba a punto de caramelo.

Barbie Candela ejecutiva.

Seguimos ruta y llegó la hora del vermut, nuestra guía nos llevó a un bar muy castizo y frecuentado donde nos sentimos muy a gusto. A los pocos minutos de llegar nosotros apareció Fele Martínez, que al verme me dio un fuerte abrazo. Le comente que había visto a Candela y me dijo que cuando volviese para verla le diera un toque para quedar los tres. En ese momento una de mis acompañantes perdió la compostura y tuvo un microorgasmo como ella misma nos confesó más tarde.

Fele, no me mires así que me pierdo.

Salimos de allí y continuamos ruta.

Comimos a base de tapas en un local estupendo y del cual os dejo la tarjeta por si os pasáis por allí. Contentos como pascuas y con fuerzas renovadas salimos a continuar la maratón.

Llegados a este punto he de reconocer que la ciudad me gustó mucho ( por lo menos las zonas que visitamos ) y que hice muchas fotos que ahora no se ubicar ni en el tiempo ni en el espacio, pero es lo que suele tener ir con guía, que no te fijas por donde vas.

Camino del parque del retiro nos cruzamos con Manu Carreño y sus dos hijos, que al verme se lanzaron a mis brazos. Charlamos un momento ya que tenía prisa, me hizo prometerle que le llamaría en mi próxima visita a la capital para ir a echar unos hoyos al club de campo, a lo que no me pude negar.

El golf no es lo suyo.

Antes de llegar al parque nos cruzamos con la manifestación de los afectados del Forum y Afinsa, realmente tiene que ser una lástima ser pobre, pero es aun peor querer ser más rico de lo que ya se es.

Disfrutamos de un bonito paseo por el retiro e hicimos unas fotos de lo más chulas que no os pienso enseñar. Volvimos al hotel, pero antes pasamos por las instalaciones de la iglesia de la cienciología donde hicimos los votos para poder entrar en su organización.

Tras unos minutos de descanso nos vestimos con nuestras mejores galas para ir al teatro, ocupándome personalmente de que mi víctima tuviera su localidad junto a la mía, y es que la obra que íbamos a ver era de misterio. Algo que viene muy bien para estrechar lazos.


Disfrutamos de la obra ( si os gusta el teatro os la recomiendo ) y salimos dispuestos a cenar algo. Después visitamos algunos locales ( de los que no recuerdo el nombre, para variar ) y acabamos la noche en el Vía Lactea, donde me pasé un buen rato leyendo los carteles que están pegados por todas partes.

En esta salgo hasta guapo.

Decidimos volver al hotel ya que estábamos cansados, aunque algunos siguieron la fiesta. Esa noche decidí que mi víctima se merecía seguir viviendo, por lo menos hasta la próxima vez.

Continuará…