MURCIA, ¡ QUÉ PIZPIRETA ERES !

Dejo a J-Vol en la habitación alicatándose ( una hora de reloj en el baño, señores, todo un divo ) y me voy a desayunar a un bar cercano. Poco después vienen a recogernos Amparo y su pareja, ( al que dijimos que llamaríamos Nacho por poner ) Meg, y el Sr.Skyzos para dirigirnos a la costa murciana.

Visitamos varios lugares de interés turístico y una zona donde tenemos previsto crear un puerto deportivo donde amarrarán sus yates nuestros exclusivos a la par que potentados amigos a los cuales tenemos repartidos por toda Europa, Oceanía, África y Asia ( con los americanos no queremos cuentas ).

Después de una opípara comida en un restaurante somalí y la visita de rigor a las piscinas naturales de la zona, nos dirigimos sin más a un puerto deportivo para dar un plácido, distendido y relajante paseo en uno de los yates que Nacho por poner posee, regando con el mejor cava todo tipo de canapés durante el trayecto mientras concretábamos detalles de la distribución y ubicación exacta del complejo hotelero que hará la competencia a Polaris World ( algo no muy difícil ) y que será propiedad de “Los Espantos”, toda una garantía de calidad.

Realizamos algunas fotos promocionales para revalorizar la zona y firmamos autógrafos a los habitantes del lugar, volviendo poco después a Murcia ¡ qué hermosa eres ! para la cena de despedida con las autoridades del lugar.

Fin de la crónica oficial.

Solo queda dar las gracias a todos los que tuvimos ocasión de conocer por su paciencia y por hacernos sentir como en casa.

En vista del éxito obtenido nos estamos planteando muy seriamente realizar algunos bolos el próximo verano para promocionar las localidades que visitemos. Los interesados ya saben como ponerse en contacto con nosotros.

En vista del interés que algunas lectoras han manifestado hacia mi persona, estoy dispuesto a hacer el esfuerzo de dejar que me inviten a conocerlas, corriendo ellas con todos los gastos ( anticonceptivos incluidos ) y previo envío de foto de cuerpo entero, reservándome la opción de aceptar o declinar la invitación.

No saturéis el correo, por favor, hay para todas.