PÉGAME OTRA VEZ...

Domingo, a eso de las nueve de la mañana.

Después de una larga noche me despiertan unos gritos que provienen de la calle. Me levanto y abro la ventana ya que la cosa parece que va para largo.

Todo está solitario salvo por una pareja ( omitiremos nacionalidades ) que parece estar manteniendo una discusión.

Ella grita a viva voz sin parar; " pégame otra vez, pégame otra vez, pégame otra vez..."

Él intenta caminar quitándosela de delante, pero ella le corta el paso una y otra vez. En una de esas el maromo le suelta un tortazo a ella en la cara.

Ella se tambalea y parece que va a caerse al suelo, pero se rehace y vuelve a ponerse delante de él y a gritar; "pégame otra vez, pégame otra vez, pégame otra vez..."

La del domingo medía medio metro menos y pesaba media tonelada más.

Vuelve a soltarle otro sopapo, pero ella encaja bien los golpes y no cesa en su empeño, sigue cortándole el paso.

Después de un par de minutos en el mismo plan giran por una esquina y desaparecen, ella sigue gritándole; "pégame otra vez, pégame otra vez, pégame otra vez..."

A lo mejor ella era boxeadora y el su entrenador, ¿ no ?