martes, 16 de septiembre de 2008

SOY UN JUDAS

El otro día me despaché a gusto.

Puse a parir a mi compañero de trabajo, o como a él le gusta llamarme, a mi "compi".

El beso de Judas, no se yo...


En teoría entre los dos tenemos que hacer el trabajo, pero me cansé de ser yo el que se pega la paliza padre para que él se pase las horas haciendo quien sabe qué.

Trabajamos en turnos distintos y solo nos vemos un día a la semana, por lo que no se si es un problema de capacidad, actitud o pasotismo.

Hablé con mis superiores y me dijeron que le harían un seguimiento, les dije que no quería enfrentarme a él ya que me cae bien, pero coño, que allí vamos a trabajar.

Simplemente les pedí que me gustaría que él me dejase las cosas como yo se las dejo cuando me voy.

No se si servirá de algo, él ahora está de vacaciones, pero yo me quedé bien a gusto.

6 comentarios:

la nena dijo...

YO tambien lo hubiera hecho y más sabiendo que es del Madrid

Meg dijo...

O hay algo más que no nos has dicho o te has quedado corto respecto de la bronca que le echaste a tus jefes sobre él, porque lo que has contado y nada es todo lo mismo.

Chasky dijo...

Pues nada, ahora a esperar a ver qué tal viene de vacaciones.

Anónimo dijo...

En un grupo siempre hay uno que curra y otro que se toca más las pelotas, el año que encontré a una chica que trabajaba lo mismo que yo, no nos volvimos a despegar para hacer los trabajos, xD.

Lara dijo...

Eso es lo que hubiese hecho yo, basta ya de tocar las narices, hombre.

Anónimo dijo...

Eres un blando, en el fondo te sientes culpable...