Si, te da sorpresas.
Y a veces son agradables y te hacen sentir el tipo más afortunado del mundo.
Y durante un tiempo vives en una nube de la que piensas que nunca te vas a bajar ( que no caer ).
Incluso cambia tu punto de vista con respecto a muchas cosas que dabas por sentado que harías o que no harías nunca.
Y compartes, disfrutas, ríes, amas, viajas…
Pero aunque siempre piensas que con esa persona será así para siempre, muchas veces no lo es.
Y con el natural desconcierto e incomprensión de los primeros momentos poco a poco te das cuenta de la realidad.
Y después de darle muchas, muchas, muchas vueltas, comprendes que una relación es cosa de dos, y que sin dos no hay relación.
Y lo aceptas.
Y sabes que con el tiempo recordarás aquello como algo muy bonito que pasó y duró lo que tenía que durar.
Y lo único que esperas es que la otra persona lo recuerde igual.
Y deseas que con el tiempo la vida te vuelva a sorprender, siempre de la manera más inesperada.
Y es que la vida te da sorpresas...
Gracias por todo, Nena.
martes, 2 de septiembre de 2008
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8 comentarios:
Ñi!
Jamás una sílaba tan inútil significó tanto para mí.
Besitos Celofán.
Jo. Lo siento mucho, mucho, de verdad.
Si en algo puedo ayudar, ya sabe dónde encontrarme.
Vaya por Dios.
Bueno,otra muesca al cinturón.
Cuando uno ama y se esfuerza por mantener algo como una relación y el otro no, no hay nada que hacer, resulta desesperante y no da frutos.
Las nubes puede que no duren para siempre, pero hayq ue disfrutar el momento.
Pues lo siento y a otra cosa marisopla
Lo siento company... no se que decir.
Un abrazo.
Uf.
Ánimo.
Totalmente deacuerdo, una relación es cosa de dos, si no, mal asunto. La vida da sorpresas, no lo dudes, y normalmente en el momento menos esperado.
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